La doctora María Neira, directora de la OMS para la Salud Pública y Medio Ambiente, dice que es "urgente" una investigación para saber con exactitud los efectos que causan en la salud y en el medio ambiente los disruptores endocrinos (ftalatos, benzofenonas, parabenes o bisfenol). La alerta es por el aumento de la exposisión humana a estas sustancias químicas, que pueden afectar al sistema hormonal de humanos y animales, y también afectan al medio ambiente.
Aunque nos parezcan raras, están en nuestro día a día, los ftalatos que se utilizan en la industria para ablandar plásticos, también se encuentran en esmaltes de uñas, adhesivos...Las benofenonas se encuentran en los filtros ultravioletas de las cremas solares, los parabenes que amplian la caducidad de multitud de productos cosméticos como los champús y el bisfenol que es un componente en la fabricación de policarbonato, que se usa para hacer envases de alimentos, botellas de bebidas, biberones, platos, tazas y cualquier tipo de recipiente. Tambien es componente de resinas epoxi-fenólicas utilizadas en recubrimientos y revestimientos de conservas y depósitos de alimentos y bebidas.
Teniendo en cuenta que hay estudios científicos que han encontrado asociaciones entre la exposición a dichos químicos y la infertilidad en varones jóvenes, ciertos tipos de cáncer (próstata y tiroides), alteraciones en el sistema nervioso infantil (hiperactividad, déficit de atención) y dada la facilidad con la que estamos en contacto y espuestos a ellos debería ser MÁS QUE "URGENTE".
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