Que nos receten los medicamentos utilizando el nombre del "principio activo", en vez de utilizar el que le ponen los laboratorios para denominarlos, está bien. Nosotros como consumidores ahorramos, y el Sistema Nacional de Salud puede emplear lo que ahorra en otros recursos. Por supuesto hablamos de los conocidos "GENÉRICOS"
¿Dónde está el problema?. Pues como siempre se les complica a quién deberiamos de ponérselo más fácil, en este caso a los más mayores, que suelen ser los pacientes polimedicados.
Llevan años asociando la hora de la toma de su medicación con el color y la cantidad de comprimidos, y ahora ni coincide el color y a veces tampoco el número de pastillas. Esto ocasiona intoxicaciones, abandono de tratamientos, desconfianza... La doctora Astier ( especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública y Medicina Familiar y Comunitaria. Coordinadora del grupo nacional de seguridad del paciente de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (SEMFYC).), dice que desde Atención Primaria proponen al ministerio de Sanidad que los envases se identifiquen con claridad, que en una de sus caras este el principio activo, la dosis y el número de dosis y forma farmacéutica del medicamento, así el laboratorio dispondrá del resto del envase para su propaganda.
http://www.elmundo.es/elmundosalud/2012/12/28/noticias/1356722572.html
http://www.medicamentosgenericosefg.es/index.html
http://www.calidadasistencial.es/images/gestion/biblioteca/320.pdf
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